¿SABÍAS QUE HAY CASOS DE hígado graso no relacionado con el consumo de alcohol?
Se conoce como esteatosis hepática no alcohólica, y consiste en el acúmulo de grasa en el hígado en pacientes que no han consumido alcohol en exceso y en ausencia de otras causas de enfermedad hepática.
Si el cuadro avanza puede llegar a una esteatohepatitis no alcohólica que se caracteriza porque esa grasa provoca una inflamación en el hígado y con el tiempo se produce un deterioro del órgano, que acaba en fibrosis hepática, cirrosis y hasta tumores hepáticos.
Para evitar llegar a estas consecuencias, deberíamos actuar en cuanto se detecte el hígado graso.
Factores de riesgo:
– Sobrepeso y/o obesidad
– Niveles elevados de azúcar en sangre
– Hiperlipemia (colesterol, triglicéridos elevados…)
– Sedentarismo y falta de ejercicio regular
– Síndrome metabólico (hipertensión arterial, hiperlipemia por triglicéridos o por colesterol y obesidad en la cintura)
– Ciertos medicamentos
– Dieta inadecuada con exceso de grasas saturadas, alimentos procesados, carnes rojas, embutidos, azúcares y harinas refinadas…
– Enfermedad intestinal
– La no gestión emocional de la rabia…
Síntomas
Los más comunes:
– Fatiga
– Dolor en la parte superior derecha del abdomen
Diagnóstico
Con frecuencia las personas con esta enfermedad no presentan síntomas o solamente molestias abdominales inespecíficas, y en las analíticas rutinarias presentan transaminasas moderadamente elevadas en diferentes analíticas (AST; ALT; GGT; fosfatasa alcalina…). También pueden presentar alteraciones en la bilirrubina, albúmina y coagulación…
La ecografía abdominal puede ayudar al diagnóstico.
Tratamiento
No existe un tratamiento específico, pero ayuda actuar sobre los factores de riesgo y adquiriendo hábitos saludables:
– Perder peso hasta conseguir el ideal calculando índice de masa corporal (IMC = peso [kg]/ estatura [m2]). Se establece como valor saludable el perímetro abdominal de 88 cm en mujeres, y de 102 cm en hombres.
– No beber alcohol
– Ejercicio físico
– Tratar la hipertensión y diabetes
– Reducir el colesterol y triglicéridos
– Una dieta saludable con un bajo contenido de sal, con cereales integrales, grasas no saturadas (aguacate, aceite oliva, nueces, semillas…)
– Sin olvidar la gestión emocional. En la medicina tradicional china, la no gestión adecuada de la rabia, la ira… es un factor tóxico para el hígado que necesita desprenderse de el.
Si deseas hacerme una consulta puedes escribirme. Estaré encantada de poder ayudarte.