Con frecuencia, cuando sufres estrés o ansiedad, buscas fórmulas mágicas que hagan desaparecer los incómodos síntomas. Buscas siempre la solución fuera, cuando la verdad es que la solución está dentro de ti.
Una de las herramientas que suelo recomendar es el ejercicio de las tres velas. Es un ejercicio, muy sencillo, pero a la vez, muy eficaz, siempre que se aplique a la mínima señal de que algo no va bien. No esperes a que la ansiedad se manifieste en todo su esplendor.
El ejercicio consiste en imaginar 3 velas encendidas a una distancia de tu brazo extendido. Haces una inspiración profunda y después expulsa el aire lentamente, pero de manera continuada, intentando mover la llama de la vela, pero controlando que no se apague. Continuas de la misma manera con la segunda vela y después con la tercera.
Imaginar 3 velas es el número mínimo para hacer el ejercicio, pero puedes repetir cuantas veces sea necesario. Nunca hay exceso de velas que apagar. Lo importante es conseguir con este ejercicio que recuperes la calma y vayas superando la ansiedad.
Este sencillo ejercicio está al alcance de tu mano y ayuda a equilibrar la balanza de tu sistema nervioso autónomo y, en consecuencia, los niveles de cortisol (la hormona del estrés) disminuyen.
Cuanto más lo practiques, antes te darás cuenta de que eres capaz de disminuir tu nivel de ansiedad utilizando solamente tu respiración.
No dejes que la ansiedad te controle, tú tienes el poder de cambiar eso. ¡Empieza hoy y siente la diferencia!
¡Ánimo! ¿Qué pierdes por probar?