Cada vez que en esta época veo cerezas en la frutería, es inevitable que mi mente me traslade a mis 8 años cuando en casa de la abuela hacíamos el ritual de las cerezas
Al terminar la comida, acompañaba a mi madre al cerezo y con una escalera de madera iba recogiendo cerezas que yo depositaba en un recipiente, y siempre colgaba un par de cerezas a modo de pendientes en mis orejas.
Ya en la mesa, saboreaba las deliciosas cerezas y sabía que debía reservar los palitos y los huesos en los correspondientes botecitos que mi abuela ponía en la mesa.
Beneficios y propiedades de las cerezas
- Depurador intestinal que ayudan al organismo a librarse de toxinas.
- Fuente de fibra, con ligero efecto laxante, ayuda a prevenir el estreñimiento
- Muy rica en antioxidantes que protegen el corazón, favorece la circulación y ayuda a bajar la tensión arterial. Y son aptas para diabéticos por bajo contenido glucémico.
- Fuente de minerales y vitaminas: (calcio, magnesio, hierro, potasio, ácido fólico y vitamina A (con gran cantidad de betacaroteno ideal para la salud del ojo), y vitaminas C y E.
- Ayudan a prevenir la pérdida de memoria
- Excelente antiinflamatorio ayuda a reducir dolor en artritis
- Ideal para la recuperación muscular después de entrenamiento deportivo.
- Fuente de melatonina que ayuda a regular los ciclos del sueño. Tomar zumo de cereza 30 minutos después de levantarte y 30 minutos antes de dormirte, mejorará tu sueño.
De la cereza se puede aprovechar todo. Ya te has comido las deliciosas cerezas y reservado los palitos y los huesos y te enseñaré que se puede hacer con ellos en el próximo post.